El levantamiento de pesas, o entrenamiento de resistencia, va mucho más allá de la construcción de músculos y la mejora de la estética corporal, especialmente en personas mayores.

Incorporar esta práctica en la rutina de ejercicio de los adultos mayores puede traducirse en una serie de beneficios para la salud que impactan significativamente su calidad de vida.

A veces pensamos que puede ser peligroso y desde luego tiene que hacerse de forma progresiva y con supervisión de especialistas de la salud y del deporte, pero esta práctica puede ayudarte a mejorar tu salud en muchos aspectos.

A continuación, se detallan algunos de los beneficios más destacados:

1. Prevención y control de la pérdida ósea y muscular: Con la edad, la pérdida de densidad ósea (osteoporosis) y la disminución de la masa muscular (sarcopenia) son preocupaciones comunes. El levantamiento de pesas estimula la construcción de nuevos tejidos en los huesos y músculos, contrarrestando estas condiciones y, por ende, reduciendo el riesgo de fracturas y lesiones, y mejorando la estabilidad general del cuerpo.

2. Mejora de la fuerza y la independencia funcional: El fortalecimiento muscular contribuye directamente a mejorar la capacidad de realizar actividades cotidianas, como levantarse de una silla, subir escaleras o llevar la compra. Esto favorece la independencia y la capacidad de vivir de manera autónoma, aspectos cruciales para la calidad de vida y la dignidad en la vejez.

3. Control del peso y composición corporal: El tejido muscular es metabólicamente más activo que la grasa, lo que significa que las personas con más masa muscular tienen un metabolismo basal más alto. Esto ayuda a controlar el peso y a mejorar la composición corporal, factores importantes en la prevención de enfermedades crónicas como la diabetes tipo 2 y la obesidad.

4. Reducción del riesgo de enfermedades crónicas: El levantamiento de pesas ayuda a mejorar la sensibilidad a la insulina, controlar los niveles de glucosa en sangre, reducir la presión arterial y mejorar los perfiles lipídicos (colesterol y triglicéridos). Todo esto contribuye a un menor riesgo de enfermedades cardiovasculares, diabetes y otros problemas metabólicos.

5. Salud mental y prevención de la declinación cognitiva: El ejercicio regular, incluido el levantamiento de pesas, ha demostrado tener efectos positivos sobre la salud mental, reduciendo los síntomas de depresión y ansiedad. Además, algunos estudios sugieren que puede ayudar a mantener la función cognitiva, posiblemente a través de la mejora de la circulación cerebral o la liberación de ciertas proteínas neuroprotectoras.

6. Mejora de la postura y reducción del dolor: Fortalecer los músculos a través del levantamiento de pesas también ayuda a mejorar la postura y a balancear las tensiones musculares, lo que puede reducir el dolor y las molestias asociadas con condiciones como la artritis o la degeneración lumbar.

Dado que el levantamiento de pesas puede adaptarse en intensidad y carga, es accesible para adultos mayores con diferentes capacidades y condiciones de salud.

Sin embargo, es crucial que el inicio de cualquier programa de entrenamiento se haga bajo la supervisión de un profesional, como un fisioterapeuta o entrenador personal, para asegurar que los ejercicios sean seguros, adecuados y efectivos en función de las necesidades individuales. Esto también ayudará a prevenir lesiones y garantizará un progreso constante hacia una mejor salud y calidad de vida.