Según la Sociedad Española de Talasoterapia, este conjunto de tratamientos es idóneo para combatir el estrés y luchar contra la ansiedad.

La Talasoterapia es una herramienta que aporta relax, bienestar y, sobre todo, salud.

Para entrar más en detalle, como curiosidad, la palabra Talasoterapia proviene del griego thalassa, que significa mar, y también del término therapeia, que hace referencia a la palabra cura.

Básicamente, cuando hablamos de Talasoterapia nos referimos a un conjunto de tratamientos con el agua del mar bajo una temperatura máxima de 37 grados centígrados. Gracias a este uso en piscinas, baños y dichas, nuestra salud se beneficia de manera muy positiva.

También se suele complementar este tratamiento con elementos afines al medio marino como limos, lodos, arenas o algas, todos ellos con fines terapéuticos.

Las personas recurren a la Talasoterapia con fines curativos y/o preventivos, con el objetivo de conservar una buena salud y bienestar físico y mental, y favorecer a su organismo.

Pero, como no podría ser de otra manera, vamos a detallar con exhaustividad las ventajas de acudir a tratamientos de Talasoterapia de forma regular:

  • La Talasoterapia ayuda a mejorar nuestro aparato locomotor en aspectos tan relevante como la recuperación muscular, ósea, ligamentos o tendones.
  • Si realizamos regularmente estas técnicas ayudaremos a nuestro sistema venoso y linfático a restablecerse mejor.
  • Reduciremos grasa corporal, lo que beneficiará el aspecto de celulitis y prevendrá los riegos de obesidad futura.
  • La Talasoterapia favorece la recuperación estética gracias a su enfoque cosmetológico.
  • Para una mejor fuerza física, la Talasoterapia está indicada para ello.
  • Y, como no, ventajas curativas. Esta herramienta mejora las afecciones dermatológicas, cardíacas, musculares, metabólicas, reumáticas y las fatigas.

 

Después de repasar los beneficios para el cuerpo, ten en cuenta que también es un tratamiento ideal para la mente. La Talasoterapia cuida nuestra salud mental porque relaja la musculatura y eso incide directamente en nuestro cerebro para calmarlo. Nos ayuda a desestresarnos, a olvidar la rutina diaria y desconectar al menos por un rato.

A fin de cuentas, se trata de un ritual que te hace viajar física y mentalmente a través de un viaje sensorial por un mundo de texturas, olores y sentimientos.

Pero, tenemos que tener precaución con ciertos grupos de riesgo a los que está contraindicado acudir a sesiones de Talasoterapia.

Las mujeres embarazadas son una de las que no se pueden someter a dicho tratamiento salvo que consulte previamente a su médico o especialista. También deben tener precaución personas que padezcan cierto tipo de enfermedades que puedan ocasionar agravamiento por someterse a la Talasoterapia.

Lo idóneo para poder disfrutar de los beneficios de esta técnica de agua es preguntar siempre a sanitarios y así poder acudir a los centros que la ofertan con total tranquilidad.